FIESTA DE LA TRADICION. DESFILE DEL DOMINGO
Diversos aspectos le han dado a la Fiesta de la Tradición de La Carlota un sello propio, como para diferenciarla de otras parecidas, que se cumplen en el país.
Uno de esos detalles, es el desfile (por avenida Yrigoyen), que se cumple de manera tradicional, en la mañana del domingo.
Tuvo esta jornada del día 10, un agregado para darle mayor atracción.
Eso lo generó la presencia del Escuadrón Riobamba del Regimiento de Granaderos a Caballo General San Martín, venido de Buenos Aires.
Justamente la Banda que acompañaba al Escuadrón de Granaderos, tuvo el honor de encabezar el desfile y su paso, recogió los primeros aplausos de la gente, agolpada a los costados de la calle, observando la columna.
Seguía a los militares, nuestra Banda Municipal, (dirigida por el profesor Juan Carlos Fernández), receptora a su paso, del afecto cordial de los ciudadanos.
Comenzó luego la interminable caravana de jinetes, estando en el primer grupo los abanderados y escoltas, tanto de la enseña nacional como la que representa a nuestra ciudad de La Carlota.
Y la admiración creció, al generarse el paso de los ilustres visitantes, o sea el escuadrón de Granaderos a Caballo.
Su apostura y la historia heroica y libertadora que recrea verlos, movió a la admiración demostrada con aplausos mientras iban transitando el recorrido.
De esa manera, en la mañana del domingo (con temperatura alta y un poco de viento) se fue desarrollando el esperado desfile. Bien ordenado y con variedad admirable de participantes (hombres y mujeres) de todas las edades.
Casi una hora demandó el transcurrir de cientos de montados.
Todos mostrando auténtico orgullo de poder vestir ese atuendo que habla de argentinidad. Que remonta a tantos que poblaron esta tierra de la “pampa húmeda” argentina, donde hoy se levanta orgullosa nuestra ciudad de La Carlota.
Otra cosa que causa admiración en esa formidable caballada, es la increíble variedad de pelajes que exhibe, asombrando a los profanos en el tema, y que hace a los animales tan particulares.
Un desfile que se convierte en espectáculo visual, que se repite casi calcado año tras año, pero siempre con emotiva trascendencia.
Como para que en cada Fiesta de la Tradición, muchas familias se ubiquen al lado de la calle, recreándose con el paso de esta desacostumbrada columna.
Marca la circunstancia anual del desfile, clara reminiscencia de un pasado que nos toca bien de cerca a los habitantes del interior del interior, en este trozo querido de nuestra provincia de Córdoba.
