Cumplida el 1º de mayo, la Misa correspondiente a la festividad en honor de San José Obrero, todo se preparó en la capilla del Barrio Norte, para cumplir con la tradicional procesión.
Llevada en hombros por distintos fieles, la pequeña imagen del santo (entronizado desde hace años en la capilla levantada en su nombre) la feligresía salió del templo, para efectuar la recorrida prevista.
De esa manera se fue desplazando lentamente la caravana, buscando completar esa caminata, por distintas calles barriales.
Mientras hombres y mujeres marchaban lentamente, el desplazamiento se cumplía y acompañaba entonando cantos y haciendo escuchar rezos.
Mirando esa pequeña imagen venerada de San José Obrero, se recordaba el punto de nacimiento de esta festividad católica.
Fue cuando en 1955, el Papa Pío XII establecía que a partir de ese momento, en honor al Santo, la festividad se cumpliría todos los 1ros de Mayo. Ello servía para destacar el ejemplo laborioso, de este Santo Patrono de los Trabajadores.
Transitando por varias cuadras, la feligresía que se había nucleado para acompañar en la procesión a San José Obrero, recorrió lugares adyacentes a la capilla, a donde se retornó tras el recorrido cumplido.
Destacamos que una vez más, los fieles acompañaron a este Santo, que siempre recibe el agradecimiento o el pedido, de todos aquellos que abogan por el trabajo, como forma de dignificarse en la vida.